lunes, 22 de febrero de 2016
EL CUERPO
La
búsqueda por encontrar un medio de expresión propio, que me permita
lograr la UNIDAD entre mi obra y mi discurso, me llevaron a tomar EL CUERPO
como medio y soporte de expresión.
Durante
mi proceso de experimentación a lo largo de estos años he transitado por
distintos materiales, formas, técnicas y medios de expresión. Manteniendo
siempre la idea de la corporeidad como medio y soporte, he utilizado el dibujo,
el texto, el accionismo, la fotografía, la instalación, la cerámica
escultórica, los textiles y proyectos de acción colectiva, todas ellas se han
estructurado en un discurso expresivo coherente que a continuación
presento.
Soledad Geronimo Salazar
CUERPO, ETAPA I, El cuerpo como matriz, medio y soporte de expresión
En esta primera
etapa, el cuerpo fue tomado como medio y soporte desde una mirada interior, en
esta etapa realicé los primeros experimentos con mi cuerpo como soporte y medio
a escala humana, nacen obras como crucifixión, "sudarios", los
dibujos titulados “De tierra y agua y fuego”.
CUERPO ETAPA II: ACCIONISMO
LA TIERRA MI
MADRE
ANTECEDENTES:
La obra “La Tierra, Mi Madre”, nació de la ausencia y la necesidad. Un vacío que germino por largo tiempo, debido a una fractura que me llevo a una confrontación con el espacio urbano occidentalizado. Fue esa escisión que me dio el impulso frenético por buscar, un lugar, un espacio, un punto de referencia, un eje.
ANTECEDENTES:
A Finales del 2004 decidí dejar de lado las
clásicas pinturas al óleo e inicie mi trabajo íntegramente con
materiales compuestos por tierra de color en su estado natural, siempre
tomando como elementos de composición mi propia corporeidad, dando origen a un
serie de dibujos intitulados, cuya serie denomine: Cuerpo /Tierra(s). Sin
saberlo había dado inicio al camino estético de “regreso”
(comienzo) de lo que sería mi propuesta estética.
Sin embargo la bidimensionalidad no
lograría satisfacer mis expectativas y pronto emprendería el viaje que
termino en la obra “la Tierra, Mi Madre”, la primera de varias acciones que
realizaría.
LA OBRA: LA ACCIÓN EN SI MISMA
La obra “La Tierra, Mi Madre”, nació de la ausencia y la necesidad. Un vacío que germino por largo tiempo, debido a una fractura que me llevo a una confrontación con el espacio urbano occidentalizado. Fue esa escisión que me dio el impulso frenético por buscar, un lugar, un espacio, un punto de referencia, un eje.
En el 2005 inicie los viajes físicos de retorno.
Luego de varios intentos de acercarme al campo, al mar, a las piedras, a las
quebradas, en Mayo de ese año, me encontré frente a frente, con Torre Torre, una depresión geológica en la
Cordillera de los Andes, ubicada a 3 Kilómetros de camino de la ciudad de
Huancayo, en el
Departamento de Junín. El impresionante paisaje asemejaba un mundo al cual
parecían haberle arrancado sus habitantes. Sus espacios revelaban
convexidades y concavidades con formas humanas en distintas escalas, que
parecían haber alguna vez habitado aquel lugar. Al recorrer sus formaciones y espacios,
sus llenos y vacíos, surgió en mi una la
sensación de escuchar en medio de ese gran silencio, la necesidad de
realizar un acto, una ofrenda, un ritual.
Algo intuitivo me llevo a
llenar una a una las cavidades de aquel
lugar con mi propio cuerpo. Los espacios
eran moldes perfectos de mi tamaño, forma
y volumen. Y cómo si un ritual de integración se
tratara, decidí cubrir todo mi cuerpo con
tierra de color rojo y arcilla (con
aquellas que en Lima había realizado
durante meses mis dibujos y composiciones,
como un primer acercamiento matérico a esta
idea), para reconstituir y restituir simbólicamente “mi
textura”, “ mi piel” a su materia original.
Así finalmente el cuerpo había encontrado
su espacio, su elemento, No había duda,
el cuerpo había salido de ahí, aquella era
su esencia. La Tierra, era Mi Madre.
Soledad Geronimo Salazar
CUERPO, ETAPA II: El Cuerpo, Como Metáfora De Transformación Psicológica Y Espiritual
El “Morir” De Este
Vivir, fase II
La
segunda etapa del proceso se centra a diferencia de la anterior, en la mirada
sobre la relación de cuerpo con el entorno (el inmediato, el mediato, la
naturaleza v/sartificialeza), aquí nacen varios
proyectos: “La tierra mi madre”, “Mallqu para Renacer”,
ambas acciones que buscan integrar el cuerpo a la naturaleza, nace
también “el morir de éste vivir” , en este proyecto hay un
gran transito y transformación de lo bidimensional a lo tridimensional,
el proyecto me impulsa a crear obras escultóricas elaboradas en
técnica de cerámica.
El
"Morir" De Este Vivir, FASE I, reflexiona
acerca de la vida y muerte del
cuerpo. Busca acercarse estéticamente
al
proceso de transformación que experimentamos los
seres humanos durante nuestro vida en esta sociedad moderna,
proceso al que irónicamente decidimos denominar : El
"Morir" De Este Vivir.
La
idea básica es mostrar metafóricamente las transformaciones
psicológicas y espirituales que el cuerpo
experimenta, en tanto su materialidad
externa va degradándose (viviendo y muriendo una y otra vez en cada
fase, en cada proceso, en cada instante a lo largo de una sola vida (EL VIVIR). La
obra nos enfrenta con una corporeidad grotesca
que representa el
contenido que contiene este continente llamado
cuerpo.
Partimos de
la concepción de que la Vida y Muerte se
integran, se yuxtaponen una sobre otra,
sin casi ser perceptible su diferencia. Vida y Muerte
son planteadas como inicio y fin a la
vez, como etapas de un proceso cíclico
de transformación constante cuya trayectoria sería la de una
espiral ascendente.
Entender la Muerte
como el inicio de un proceso, y no
necesaria o únicamente como el fin, nos permite celebrar y festejar
la Muerte, (nuestras continuas muertes ), pues solo en la medida que vamos
“muriendo” podremos vivir. Solo la muerte de parte de nosotros nos permitirá
vivir en libertad.
Soledad Geronimo Salazar.
Lima, Diciembre del 2016
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